¿Qué es el DAFO?
La terminología DAFO viene de las iniciales de Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades. Esta es una herramienta que nos ayuda a realizar un análisis interno y externo de nuestra empresa con el objetivo de saber en qué situación se encuentra esta dentro del mercado. El DAFO es uno de los primeros instrumentos que se utiliza cuando nos planteamos adentrarnos en un nuevo proyecto, ya que nos permitirá darnos cuenta de los obstáculos y ventajas que podremos encontrar en el mercado.
Cuando la empresa ya está creada se recomienda realizar un análisis DAFO cada cierto tiempo. Este hábito nos permitirá encontrar soluciones e identificar posibles oportunidades.
¿En cuántas partes se divide el análisis?
El análisis DAFO, como bien indican sus siglas, se divide en dos partes fundamentales que a su vez se subdividen en dos categorías. En primer lugar, realizaremos un análisis interno de la empresa pensando en las fortalezas y debilidades que posee en ese momento, y en segundo lugar, pasaremos a un análisis externo, en el que se tendrán en cuentas las amenazas y oportunidades que nos ofrece el mundo exterior.
¿Qué tendremos en cuenta en cada parte?
Lo primero que hay que tener claro es que un análisis DAFO requiere de mucha investigación y empeño. Recuerda que es una herramienta que proporciona una visión real de la situación de tu empresa, por tanto debemos de ser detallista y ordenados para poder gestionar, posteriormente, toda la información recogida.
A continuación, te explicamos los aspectos más importantes a tener en cuenta en cada apartado del análisis DAFO:
- Análisis interno (Fortalezas y Debilidades): lo primero es pensar en todos los recursos y capacidades que tiene nuestra empresa. En las Fortalezas pondremos el foco en los elementos que nos diferencian de nuestra competencia. En las Debilidades tendremos que ser realistas y pensar en aquellos aspectos que nuestra competencia tenga y nosotros no.
- Análisis externo (Oportunidades y Amenazas): Ahora nos detendremos en factores externos que pueden afectar en nuestra actividad empresarial (legales, tecnológicos, sociales, políticos, etc). En las Oportunidades estudiamos qué aspectos se encuentran en el exterior y cómo podemos convertirlos en ventajas competitivas. Sin embargo, en las Amenazas tendremos en cuenta aquello que puede suponer un riesgo, en un momento dado, para nuestra empresa