Actualmente, vivimos en una sociedad en la que tenemos mucha oferta en el mercado. Todos los productos son parecidos y la única diferencia en muchas ocasiones está en la marca que hay detrás del mismo. Por este motivo entre otros muchos, es crucial que una marca trabaje en su Plan de empresa y en las estrategias expuestas en el mismo. Hoy en Comunicare, te enseñamos la terminología Análisis Interno y su importancia. ¡Sigue ampliando tu vocabulario!
¿Qué es el análisis interno?
El análisis interno de la empresa es un ejercicio de introspección que se hace desde dentro de la empresa con el fin de saber con qué recursos, habilidades y competencias contamos. Si tenemos en cuenta estos factores, sabremos cómo actuar frente a la competencia y le ofreceremos a los clientes nuestros mejores servicios. Además, a raíz de este análisis podremos diseñar estrategias personalizadas y obtener unos buenos resultados.
Digamos que lo que hacemos en el análisis interno es ser críticos y valorar cómo nos estamos desarrollando como empresa. Estudiamos nuestras debilidades y fortalezas y trabajamos teniéndolas muy presentes en todo momento. El análisis interno nos ayudará a seguir creciendo y a encontrar una diferenciación frente a nuestra competencia, ya sea directa o indirecta.
Para poder desarrollar nuestro análisis tenemos que ser conscientes de la situación de la empresa y saber la opinión de todos los miembros de la empresa, sin importar la jerarquía en la que se encuentren. Es muy probable que no se visualicen las mismas situaciones en la dirección que en un trabajador. Por ello, todas las opiniones son importantes si nuestro objetivo es mejorar. Para realizar este tipo de análisis podemos acudir a técnicas especializadas como: el análisis DAFO o el Análisis GAP.
¿Qué ventajas podemos encontrar?
La ejecución de un buen análisis interno puede proporcionarnos diversas ventajas en nuestra empresa. Cuando queremos mejorar lo primero que debemos hacer es no “echar balones fuera” y empezar por estudiar y analizar lo que tenemos dentro de casa. En muchas ocasiones tendemos a culpar a los demás, sin mirar conscientemente lo que nosotros mismos hacemos.
El objetivo del análisis interno es descubrir qué está ocurriendo en mi empresa y proponer planes de acción que mejoren esa situación. De este modo, si conseguimos este objetivos podremos tener los siguientes beneficios:
- Detectar errores en la comunicación interna.
- Ser conscientes de errores que habían pasado por alto.
- Estudiar los riesgos que actualmente posee la empresa.
- Conocer las fortalezas y debilidades.
- Crear estrategias para potenciar nuestros puntos fuertes.
- Conseguir una unión empresarial.
Todos estos beneficios y muchos más son los que puedes llegar a conseguir si realizas un buen análisis interno. ¿Estás preparado? ¡Consigue tu propósito!