¿Qué son?
Las empresas basan sus estrategias y enfocan todos sus esfuerzos en satisfacer a los clientes externos, que son los consumidores y clientes de tus productos o servicios. ¿Sabías que tus clientes no sólo incluyen las personas que entran en tu establecimiento o hacen pedidos?. Los clientes también incluyen a los empleados de la organización (clientes internos), que son los que trabajan todos los días para que el negocio sea un éxito.
Por lo tanto, un cliente interno es cualquier miembro de tu organización que depende de la ayuda de otros para cumplir con sus responsabilidades de trabajo. Dentro de esta incluimos a los empleados, servicios externos y a la gerencia que contribuyan al funcionamiento de la empresa y viabilidad del negocio.
Los clientes internos no compran los productos o servicios de la empresa pero reflejan el clima organizacional y se encargan de generar el vinculo emocional y experiencial con el cliente externo. Por esta razón, la relación con el cliente interno tiene un papel clave en el éxito de la empresa.
Es importante que haya un buen clima laboral de la empresa, para que los propios empleados no boicoteen la misma y tengan una mayor productividad. Las tensas relaciones internas también pueden afectar negativamente la moral de la empresa.
Cómo elaborar una buena estrategia de marketing interno
En esta última década, muchas empresas realizan una búsqueda constante de formas de mejorar las relaciones internas de los empleados, con el objetivo de generar un ambiente de trabajo más saludable.
Para retener el talento y crear un buen clima laboral, se elaboran estrategias de marketing interno. Esta acción permitirá que a los trabajadores que les guste su puesto de trabajo y se vean valorados en la empresa. A partir de una estrategia de marketing interno puedes realizar acciones para para mejorar las relaciones internas de formación y ambiente de los empleados, lo cual se traduce inmediatamente en el éxito de la organización.
Un ejemplo de estrategia de marketing interno es mostrar agradecimiento por los esfuerzos de tus empleados. Otro ejemplo puede ser intentar fomentar su retroalimentación y participación para que sepas que su opinión es valorada en el marco organizacional de la empresa.
El salario emocional es aquella la retribución de un empleado que no es económica, si no que se centra en satisfacer las necesidades personales, familiares y profesionales del trabajador. Esto tiene el objetivo de retener al talento y que se sienta más considerado en la empresa.
Una de las formas mas eficaces para fidelizar al cliente interno es la aplicación del salario emocional. Ejemplos de salario emocional pueden ser:
- Horario flexible.
- Aplicar el teletrabajo.
- Planes de formación a los empleados.
- Días libres por cumpleaños o momentos importantes.
- Beneficios sociales: ayuda a la educación o planes de jubilación por ejemplo.
- Espacios de desconexión del trabajo.
- Reconocimiento por parte de la empresa.
- Actividades de voluntariado promovidas por la organización
Para más información, consulta nuestra web.