Toda empresa sueña con crecer tanto económicamente que sea capaz de cotizar en bolsa. Es decir, una vez que las empresas o marcas comienzan a evolucionar dentro del mercado, se plantean la opción de salir a bolsa con el fin de impulsar aún más ese crecimiento.
Una vez que la marca se decide a impulsarse dentro del mercado de valores, es lo que en marketing conocemos como OPI.
Si quieres saber más sobre este tipo de concepto, así como lo que supone su aplicación para las empresas, sigue leyendo, desde Comunicare te lo contamos.
¿Qué es OPI?
Las siglas OPI designan la primera vez que una empresa o entidad ofrece sus acciones a un público dentro de un mercado de valores. “Oferta Pública Inicial”, es decir, el momento en que la empresa sale al mercado o sale a la bolsa de valores.
Fundamentalmente, la principal de las razones del OPI es recaudar más capital emitiendo acciones públicas. Normalmente eso se hace para impulsar la ampliación de la empresa, ya sea desarrollando los negocios existentes o adquiriendo otros.
Pero hay otras razones. Una es distribuir los riesgos de sus actividades entre un número más amplio de inversores, más allá de sus fundadores o promotores iniciales.
Otra podría ser que los primeros accionistas del negocio quieran vender sus acciones. Digamos que una sociedad de capital privado ha invertido en un negocio, pero ahora quiere cobrar su inversión; puede hacerlo a través de una OPI. Es una manera elegante de salir del negocio.
Una empresa que planea una OPI normalmente se prepara para ello mucho tiempo antes. Esto se debe a que necesitará garantizar que sus cuentas, su gestión y sus procedimientos internos cumplan con las reglas del mercado de valores en el que cotice.