Seguramente no sea la primera vez que tienes que leer un prospecto en papel, buscar un artículo en internet o ver un vídeo explicativo sobre un cierto producto, actividad o concepto que desconoces y deseas aclarar tus dudas al respecto.
Esta explicación en cuestión es lo que conocemos como ‘tutorial’. Es decir, una serie de pasos ya sea a modo de video o texto escrito dónde quedan recogidas las aclaraciones sobre cualquier tema que desees.
En este artículo de Comunicare le contaremos todo acerca de este concepto, desde sus orígenes hasta lo positivo que puede resultar a nivel social.
¿Qué es un tutorial?
Antes de interiorizar más sobre este concepto, saber que el término ‘tutorial’ proviene del latín. Más exactamente del verbo ‘tueri’, que puede traducirse como “proteger o vigilar”.
Se trata de un curso breve y de escasa profundidad, que enseña los fundamentos principales para poder utilizar cualquier tipo de producto o sistema, así como para poder realizar ciertas tareas que desconocemos y necesitamos de su aprendizaje.
Es decir, es un término que recoge, en pocas palabras, la enseñanza de algo. Son pequeñas guías o compilados de instrucciones que, en formato papel, electrónico o multimedia, están destinados a aquellos usuarios que no tienen la capacidad de manejo necesaria para utilizar un cierto producto o servicio y precisan una ayuda.
A pesar de que la informática es el campo donde más se precisan este tipo de explicaciones, también existen tutoriales para guiar a las personas en todo tipo de campos y materias.
De esta manera, nos encontramos que también existen tutoriales de fotografía, carpintería, cocina, música e incluso de idiomas.
Este tipo de guías suelen seguir un orden cronológico, ya que presentan una serie de pasos cuya complejidad va en aumento en función lo vamos leyendo y comprendiendo. Esto quiere decir que en el primer paso se presenta un nivel básico de conocimientos, el cual va progresando a la vez que completamos los pasos previos.