¿De dónde proviene la terminología Kaizen?
Kaizen encuentra su significado en los términos japoneses “Kai”, traducido como modificaciones y “Zen” como mejorar. Por tanto, su definición quedaría algo así como “proceso de mejora continua”. Este término suele utilizarse en el mundo empresarial como Filosofía Kaizen la cual se creó al terminar la segunda guerra mundial con el objetivo de detectar y solucionar los problemas de las empresas.
Esta filosofía se sustenta en la teoría de que no se debe nunca ser conformista y que es necesaria la mejora continua y constante. Y es que por mucho que pensemos que todo va bien en nuestra empresa, siempre encontraremos un error y una forma de mejorar. Nadie es perfecto y nuestra empresa también tiene errores. El reconocimiento de esta cuestión es fundamental para seguir creciendo empresarialmente.
Después de esta reflexión, ¿crees que tu empresa tiene errores? Sigue leyendo, en el siguiente apartado te explicamos cómo implantar la filosofía Kaizen en tu empresa.
Implanta esta metodología en solo 7 pasos
La metodología Kaizen se puede aplicar sin complicación en 7 pasos. Eso sí, la primera premisa es ser realista con la situación actual de tu empresa y afrontar el proceso de esta filosofía con un pensamiento crítico en todo momento. Los pasos son los siguientes:
- Selección de un tema: Es importante seleccionarlo teniendo en cuenta los objetivos de la empresa. Por ejemplo, un tema a seleccionar podría ser la calidad.
- Crear un equipo de trabajo: formado por los distintos miembros de diferentes secciones o departamentos de la empresa. Con ello conseguiremos mayores puntos de vista.
- Analizar datos e información: Gracias a esto conseguiremos obtener una visión amplía y realista.
- Gembutsu Gemba: esta expresión encuentra su significado en la frase “ir y ver” y, es esto precisamente lo que hay que hacer. Ir a buscar en qué departamento se encuentra el problema y se verifican los datos de la fase anterior.
- Elaborar un plan de contramedidas: Se fijarán las acciones pertinentes para solucionarlos, las fechas así como el nombramiento de un responsable que vele por su cumplimiento. Esto es fundamental en la filosofía Kaizen.
- Evaluación de resultados: Si la evaluación no va bien, volveremos a trabajar los pasos anteriores.
- Control y registro del problema: cuando llevemos unos tres meses de buenos resultados daremos el problema por solucionado y volveremos a la fase inicial para detectar otra mejora en nuestra empresa.