El Índice de Precios al Consumo (IPC) es un indicador encargado de medir la variación de precios de una cesta de bienes y servicios en un lugar concreto durante un periodo determinado de tiempo. Este índice se utiliza para medir el impacto de las variaciones en los precios en el aumento de coste de vida, seleccionando para ello productos concretos que se asemejan al consumo de una familia, como pueden ser alimentos, calzado, ropa, carburante, etc. Una vez recopilada esa información se realiza un seguimiento de sus precios durante un tiempo delimitado y concreto, que suele ser trimestral o anual.
¿Qué significa IPC Subyacente?
El IPC Subyacente es un indicador económico global cuya finalidad es medir, a través del tiempo, la subida monetaria de los precios de bienes y servicios representativos del consumo de los hogares en un país. Este indicador dependerá del sitio y el valor de la moneda de ese lugar en el que estemos.
El IPC incluye productos cuyos precios dependen determinantes que un estado no puede controlar. Ante ello, para solucionarlo se utiliza la inflación subyacente, que no incluye ni productos alimenticios ni energéticos.
De este modo, el IPC Subyacente sería la media ponderada del IPC de alimentos elaborados, de servicios y de bienes industriales no energéticos.
¿Cómo se calcula el IPC Subyacente?
El IPC Subyacente, se calcula restando al IPC los productos alimenticios no elaborados y los productos energéticos. Dado que éstos son los productos que más varían monetariamente a lo largo del tiempo y que dependen de muchos ostros factores internacionales que no dependen únicamente del territorio, gracias a este concepto, se puede valorar de una mejor forma la variación de precios real que se ha producido en un país.
De esta forma, si queremos calcular la inflación de los productos de consumo provocada por el desarrollo de la economía del país, es necesario realizarlo a través del IPC Subyacente.