Las principales desventajas de la publicidad en televisión están relacionadas con factores como el sentimiento del público, los altos costes que implica su realización y el hecho de que no siempre consigue alcanzar los objetivos. Desde su popularización en 1950, la televisión es uno de los medios de comunicación más vistos diariamente.
Sin embargo, los cambios de consumo de los últimos tiempos han convertido a la televisión en uno de los formatos más delicados para publicitar marcas. En este post te explicamos con todo detalle las principales desventajas de la publicidad en televisión y los diferentes formatos que puede adoptar.
Índice de contenidos
¿Qué es la publicidad en televisión?
La publicidad es una fórmula de comunicación pagada por las empresas que desean anunciarse en los diferentes medios disponibles. El objetivo de la publicidad es conseguir que las personas compren el producto que promocionan, contraten un servicio o actúen de determinada forma. El objetivo perseguido depende de si el anuncio proviene de una empresa privada o de una institución pública.
La publicidad se divide en dos tipos: online (anuncios en redes sociales, email marketing, anuncios en buscadores) y offline (publicidad tradicional en prensa, radio y televisión, anuncios en exteriores). Así todo, la publicidad televisiva, como su nombre indica, se define como el tipo de comunicación pagada que promociona productos o servicios por medio de la televisión.
Tipos de publicidad televisiva
La publicidad en televisión no consiste únicamente en colocar anuncios en medio de las pausas entre un programa y el siguiente, sino que existen diferentes formatos para hacer publicidad en la televisión.
- Spot. El spot publicitario es el formato más popular, aunque quizás te suene más el nombre de anuncio. Su duración oscila entre los 10 y los 60 segundos, en los que el anunciante intenta captar y mantener la atención del espectador.
- Patrocinio. Este formato consiste en la financiación, por parte de una marca, de la emisión de un contenido audiovisual. A cambio, el nombre de la marca o sus productos deben ser mencionados durante su desarrollo.
- Publicidad estática. Este formato publicitario se realiza en espacios abiertos, como los estadios de fútbol, cuyas competiciones son emitidas en televisión. Para conseguir impactar al usuario, este tipo de publicidad se muestra con una elevada frecuencia, debido a su presencia en segundo plano.
- Bumper. Este formato publicitario consiste en la integración de un producto o marca en las cortinillas de la cadena, creando así una vinculación entre el programa y la marca.
- Sobreimpresiones. Esta forma de hacer publicidad consiste en superponer un mensaje o imagen durante la emisión de un programa, sin interrumpirlo. Se utiliza durante la emisión de programas de entretenimiento o competiciones deportivas.
- Product placement. Este formato se basa en insertar un producto o marca durante el desarrollo de un contenido audiovisual y existen dos formas de llevarlo a cabo. El product placement pasivo consiste en la aparición de un producto en una escena, sin ser mencionado o utilizado. El product placement activo se refiere a la aparición repetida de un producto y que toma parte de la acción mediante menciones o interacciones.
- Telepromoción. La telepromoción se basa en la utilización de un personaje destacado de la cadena o del programa para realizar la promoción de un producto o servicio.
- Bartering. También conocido como trueque. Es un sistema de intercambio en el que un medio cede una parte de su espacio publicitario a un determinado anunciante. Se considera un trueque entre ambas partes porque la marca ya entrega la pieza hecha.
Desventajas de la publicidad en televisión
Como todo en la vida, la publicidad televisiva tiene sus pros y sus contras. Los beneficios que ofrece este tipo de publicidad son su gran penetración social, el alcance que llega a tener y su versatilidad. Sin embargo, las desventajas que presenta la publicidad en televisión son igual de llamativas que los beneficios que ofrece.
Las desventajas de la publicidad televisiva incluyen el hecho de que los anuncios televisivos son cortos, caros, no siempre representan el producto o servicio de la mejor manera y requieren mucho esfuerzo para crearlos. En estos aspectos vamos a profundizar a continuación.
Alto coste de producción
Una de las primeras desventajas de la publicidad en televisión es que los anuncios publicitarios tienen asociada una alta inversión en creatividad, desarrollo y producción, además del gran coste que supone emitir un anuncio. Todo ello se traduce en el gasto de grandes cantidades de dinero que únicamente pueden asumir las marcas consolidadas y las entidades públicas.
El casting, el desarrollo de una idea, la filmación, la edición y la producción son las responsables de convertir la publicidad televisiva en una de las más caras. Además, no solo hay que pagar por el hecho de crear y llevar a cabo el anuncio, sino que los anunciantes deben comprar el espacio publicitario para emitirlo.
El precio del espacio publicitario depende de la hora de emisión y del canal en el que se emita. En España, cadenas como Cuatro o La Sexta tienen tarifas más baratas que las principales cadenas como Telecinco o Antena3. En estas cadenas, para que te hagas una idea, un anuncio en prime time, que es la hora de máxima audiencia, oscila entre los 17.500 y los 25.000 euros.
Sin embargo, las televisiones autonómicas ofrecen tarifas publicitarias más bajas que las grandes cadenas y, por tanto, las PYMES y los pequeños negocios pueden acceder a sus espacios publicitarios. Aún así, un anuncio en prime time en una cadena autonómica no baja de los 3.000 euros.
Visión negativa del espectador
La segunda desventaja de la publicidad en televisión está directamente relacionada con la audiencia. Desde el punto de vista del espectador, los anuncios son un verdadero incordio, debido a la interrupción que suponen en la visión de los programas. En los espacios publicitarios, que duran varios minutos, se colocan anuncios seguidos que acaban por cansar a los espectadores.
Los anunciantes se esfuerzan por hacer anuncios cada vez más creativos, que en ocasiones llegar a ser como pequeñas películas, para facilitar su visualización y disminuir la mala percepción que se tiene de ellos.
Además, el hecho de ver un anuncio de tras de otro durante varios minutos seguidos provoca un cansancio en los televidentes, que acaban por hacer zapping. De tal manera, los espectadores van cambiando de canal hasta que encuentran uno en el que no vean anuncios y puedan continuar con su entretenimiento. Por tanto, al colocar un anuncio en televisión nos arriesgamos a tener menos impacto por la práctica del zapping.
Riesgo de no alcanzar el público deseado
La última desventaja de la publicidad en televisión tiene su base en la no consecución de los objetivos planteados por la marca. El hecho de que exista tanta variedad de canales disponibles a nivel local, nacional e internacional hace que sea mucho más difícil alcanzar a tu público objetivo con solo publicitar en uno de ellos. Además, el auge del vídeo bajo demanda gracias a empresas como Netflix o HBO hacen que cada vez sea más complicado alcanzar a la audiencia deseada.
Otro de los factores que se convierten en una desventaja de la publicidad televisiva es el hecho de que no siempre se consiguen los objetivos marcados. Se debe analizar el alcance de las visualizaciones que tiene el bloque horario donde se coloca la publicidad, para saber si la inversión ha merecido la pena o no.
Los cambios constantes en cuanto a la programación de la parrilla televisiva no ayudan a que tus anuncios lleguen al público que deseas. Recuerda que la clave de una buena publicidad televisiva es que se coloque o patrocine programas que se relacionan con los valores y la misión de tu marca.
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